En el ámbito comercial hay diferentes tecnologías que se emplean de una forma cotidiana. Antes teníamos ciertas limitaciones en este sentido, sin embargo, con el paso del tiempo y la evolución de los aparatos de logística o identificación, así como los ordenadores u otros dispositivos, contamos con un interesante abanico de posibilidades.
Algo que debes conocer es la tecnología RFID, pues se usa mucho en la actualidad y tiene ciertas funcionalidades bastante interesantes. ¿Todavía no sabes qué es y cuáles pueden ser sus pros y contras? Precisamente, en este artículo vamos a mostrarte todo esto para que te hagas una idea más clara de todo lo que puede hacer por ti.
¿Qué es la tecnología RFID?
La tecnología RFID es un sistema empleado para la identificación de productos. Se muestra como una alternativa al código de barras tradicional y tiene un funcionamiento parecido, pero ofrece algunas mejoras respecto a su predecesor.
Mientras que el código de barras usa una imagen que tiene ciertos símbolos y que coloca en un objeto o producto, la RFID va a utilizar ondas que se conectan con un microchip. Esto permite variedad de soportes para la identificación, como etiquetas o tarjetas.
La realidad es que se trata de una tecnología que está muy extendida y que se emplea muy a menudo, aunque no seas consciente de ello. Es posible que la utilices en parkings de cobro automático, a la hora de comprar objetos o cuando empleas una tarjeta de identificación sin darte cuenta.
Funcionamiento de la tecnología RFID
Las tecnologías RFID se componen de una antena, un lector y una etiqueta, así de simple. Integrarlo en un comercio, negocio o almacén de logística es bastante sencillo precisamente porque no resulta especialmente aparatoso. Sin ir más lejos, puedes adquirir lectores y otros utensilios relacionados con este sistema en la tienda especializada Barcode Center que también tiene un servicio de venta online.
Cuando pasas el objeto en cuestión, la antena va a detectar la etiqueta y emitirá una señal que va al lector. Será el lector el que traslade la información que contiene el tag al sistema central, en ese momento, se van a actualizar los datos en tiempo real. Esto significa que todos los ordenadores o dispositivos conectados a esta base de datos van a poner estar al día en el mismo momento. Con este gesto se consiguen minimizar los errores y se mantiene un mayor control de inventarios.
Las ventajas de la tecnología RFID
La tecnología RFID ha supuesto un avance respecto a sistemas anteriores como el código de barras. Por ese motivo nos expone una serie de ventajas interesantes que te mostramos a continuación:
- Modo de empleo sencillo. Se trata de una tecnología que es realmente fácil de usar y gracias a ello la pueden emplear todo tipo de operarios o trabajadores sin necesidad de grandes conocimientos ni procesos de adaptación lentos. Basta con acercar el chip para que el lector haga su trabajo de forma automática.
- En tiempo real. Traslada la información en tiempo real a todas las bases de datos y esto hace que se obtenga una visión realista inmediata de todos los procesos o fases en las que se encuentra el producto.
- Multifunción. Los sistemas RFID se pueden configurar para que se realicen determinados procesos automatizados como la habilitación de permisos, por lo que se puede sacar mucho partido a esta herramienta más allá del control de inventarios.
- Seguridad. El chip que emplea este sistema contiene un código único destinado a garantizar que es auténtico, por lo que se reduce la posibilidad de errores o de fraudes con esta tecnología que se hace especialmente segura.
- Control. Mejora el control y trazabilidad de los productos en almacenes o comercios ofreciendo información al momento.
- Agilidad en los procesos. Es capaz de agilizar cantidad de procesos e incluso reducir las colas en los negocios, pues su uso es muy rápido e instantáneo y esto optimiza el servicio.
- Reduce el uso de papel. Emplear un chip para determinados trabajos o servicios, digitaliza y automatiza el negocio de forma que se puede prescindir del tradicional recurso del papel. Esto es positivo por una cuestión de comodidad y tiempo, pero también lo es en el sentido de la sostenibilidad y la reducción de residuos innecesarios.
Las desventajas de la tecnología RFID
Ahora ya conoces todas las ventajas de su uso, pero, ¿qué inconvenientes nos puede traer el uso de la tecnología RFID? Como ocurre con todo, también tiene sus aspectos menos favorables que debes tomar en cuenta. Estas son las principales desventajas que nos muestra:
- La inversión. Lo cierto es que este punto va a depender mucho de la magnitud del negocio y el tipo de tecnología RFID que se emplee, no obstante, hay que realizar una inversión inicial para poner este sistema en marcha. Esto es más habitual en grandes almacenes que necesitan muchos recursos y menos acusado en pequeños comercios o eventos puntuales.
- Un lector indispensable. En tecnologías como los QR no hace falta disponer de un lector porque se trata de códigos que permiten ser descifrados con un teléfono móvil cualquiera. La RFID necesita siempre la intervención de este dispositivo para su uso, algo que puede ser menos práctico en algunos casos, aunque aumenta la seguridad.
- Alcance limitado. El lector y la etiqueta deben estar cerca para que se emita y se lea la señal sin errores, de hecho, tienen que estar prácticamente en contacto para que se realice el trabajo de una forma correcta.
- Las interferencias. Pese a que no es algo que suceda de manera habitual, lo cierto es que ciertas señales pueden crear interferencias a la hora de hacer una lectura con esta tecnología y dar pie a errores o limitaciones en su correcto funcionamiento.
- Actualización. Como ocurre en prácticamente todas las tecnologías, es interesante actualizar los equipos de RFID cada cierto tiempo para que mantengan su eficacia. Hay que contar con este gasto extra de forma periódica cuando se introduce en el sistema de la empresa.
Compatibilidad. Los negocios locales y comercios no tendrán ningún problema, pero en grandes empresas puede existir una diferencia de compatibilidad porque el sistema RFID puede variar según el país o el tipo de industria.